La Mitsubishi Xpander es una solución adecuada para momentos en que quieres llevar a toda la familia o los amigos y quizá cargar con muchas cosas. Aquí vamos a observarla juntos.
¿Pensando en comprar una Mitsubishi Xpander? Pues nosotros ya probamos este modelo familiar, el cual tiene una larga trayectoria a nivel internacional, pero llegó a Colombia en 2021. Aunque ya recibió una actualización estética, aquí te contamos nuestra experiencia con una versión “pre facelift”, frente a la cual no cambian características fundamentales como su conjunto mecánico.
Test drive en detalle:
Mitsubishi Xpander: la función no riñe con la forma
Si bien hay varios SUV de gran tamaño con tres filas de asientos para siete pasajeros, la oferta no es tan nutrida cuando se trata de modelos más pequeños. Ese es uno de los puntos clave de la Xpander, que ofrece esta característica en una carrocería más compacta a un precio notablemente inferior. Además resulta ser más fácil de conducir en el denso tráfico urbano, ya que solo mide 4,47 metros de largo.
Si bien se ve más larga de lo que en realidad es, mide lo mismo que muchos sedanes pequeños, como por ejemplo un Chevrolet Onix o Nissan Versa. Algo que nos gusta es que a pesar de su carácter funcional, no significa que por eso deba verse como una “neverita”: cuadrada y sin gracia. Todo lo contrario, su carrocería de líneas afiladas muestra la identidad Dynamic Shield que caracteriza a la marca.
Nos gustan los faros LED divididos en la parte frontal, los diferentes elementos cromados que hay a lo largo de la carrocería y unos stops LED cuya firma luminosa recuerda al logo de la marca. Viene con unos rines bitono de 16 pulgadas, que usan unas llantas Bridgestone Ecopia EP150 en medida 205/55 R16, que le dan una respetable altura respecto del suelo de 20 centímetros.
A pesar de eso, la Mitsubishi Xpander no es un vehículo tan alto y las puertas tienen un buen ángulo de apertura. La suma de estas cosas resulta ideal para bajarse o subirse con facilidad del vehículo y de hecho, es una característica que pueden valorar mujeres en estado de embarazo, adultos de la tercera edad o personas con movilidad reducida, algo que no es ajeno al día a día de cualquier familia.
Mitsubishi Xpander: lista para llevar a toda la familia
Para el conductor también hay una posición de manejo cómoda y elevada, ya que todos los comandos están a la mano y tanto el volante, como la silla, se ajustan de forma manual en altura y profundidad. Es evidente que la ergonomía de la cabina ha sido pensada para generar la menor cantidad de distracciones posible, a lo cual se suma un habitáculo de diseño moderno, con formas y colores bastante sobrios.
Aunque los materiales no son lujosos, se sienten sólidos y se evidencia la buena calidad de su ensamble. A tono con su vocación familiar, nos gusta que todo sea fácil de limpiar por si algo se ensucia y tal como lo esperábamos, podemos guardar cualquier cosa que se nos ocurra en los múltiples compartimentos que hay, entre ellos una bandeja deslizable oculta bajo el asiento del pasajero.
Ahora hablemos de la gran virtud de la Mitsubishi Xpander y es el espacio en la parte posterior. Cuando nos acomodamos en la segunda fila descubrimos que los pasajeros pueden tener espacio de sobra para la cabeza y las piernas, aunque eso depende de cómo estén configuradas las demás sillas. Lo mejor de todo son las salidas de aire con sus controles de aire acondicionado independiente.
Aquí vale la pena resaltar otros detalles, como la cojinería mullida y el tacto suave que tiene la tapicería de tela de las sillas, lo cual va acorde con esa sensación de confort y nos parece mejor que los materiales de cuero sintético o vinilo que se encuentran en otros vehículos similares. Si queremos más confort, la plaza central se puede transformar en un cómodo reposabrazos.
Y claro, nos queda la tercera fila de la Mitsubishi Xpander, con unos puestos más estrechos aptos para niños o personas de baja estatura. Para usarlos solo hay que plegar las sillas de la segunda fila, algo que se hace con facilidad y no requiere mucha fuerza. Tampoco es complicado acceder a ellos, pero más allá de un par de portavasos no hay mayores amenidades en esta área.
No hay duda que la marca japonesa aprovechó cada centímetro de espacio interior y en la Xpander no solo pueden viajar siete personas, sino que también es posible “cargar hasta con el perro”, tal como se espera de un vehículo familiar. Si bien la compuerta trasera es de apertura manual, el baúl tiene una boca de carga muy ancha y la altura del piso al bomper hace que sea muy cómodo poner cosas.
Incluso usando los siete puestos, cuando el espacio no es muy grande, contamos con unos cajones ocultos bajo el piso del baúl para llevar objetos pequeños. Al plegar las sillas traseras es otra historia y queda un espacio de carga plano, en el que podemos acomodar sin problemas una maleta mediana, dos de mano, un par de bolsos y aún queda lugar de sobra para guardar más cosas.
Mitsubishi Xpander: bajo consumo y cómoda en ciudad
Después de observar por dentro y por fuera la Mitsubishi Xpander, llega el momento de sentirla al volante. Accedemos fácilmente con una llave inteligente, presionamos el botón de encendido y de forma suave, el motor MIVEC de cuatro cilindros y 1,5 litros cobra vida. Tiene 16 válvulas, funciona con gasolina corriente y entrega 105 hp de potencia a 6.000 rpm, así como un torque de 141 Nm a 4.000 rpm.
Está acoplado a una caja automática de cuatro velocidades con overdrive, algo que ya nos parece un poco anticuado en los tiempos que corren. Claramente no nos va a deslumbrar con su desempeño y en realidad ese no es su objetivo, pero ojo a estos datos: recorrimos poco más de 300 km por la sabana de Bogotá entre la semana y el consumo promedio de gasolina corriente fue de 51 km/galón.
Esa es la ventaja de tener un peso vacío de apenas 1.235 kilos, aunque debemos anotar que todo el tiempo solo rodamos dos personas a bordo y algunos paquetes en el baúl. Pero demuestra que el conjunto mecánico es eficiente y suficiente para andar en ciudad o vías tipo autopista, aunque nos queda la inquietud por ver cómo se mueve con el cupo completo de personas y maletas.
Lo mejor de la experiencia de manejo con la Mitsubishi Xpander es que es muy fácil moverse en la ciudad, pues se conduce con suavidad y no es complicado estacionarla en los cada vez más estrechos parqueaderos de los centros comerciales y restaurantes que viven llenos los fines de semana, gracias a sus dimensiones, el tamaño de los espejos y la visibilidad en todos los puntos.
Pero no todo es perfecto y la conectividad puede mejorar teniendo en cuenta que es un modelo familiar para siete personas. La unidad que probamos tenía una pantalla con botones pequeños, no es muy funcional y apenas tiene un puerto USB que sale de un cable en la guantera. La cámara de reversa tampoco tiene buena resolución y el radio solo es de cuatro parlantes. Así que el sonido se pierde en las sillas traseras.
Otro capítulo es la seguridad, pues aunque transmite confianza al conducirla y contamos con ABS, control de estabilidad y asistencia de arranque en pendientes, solo viene con dos airbags, el cinturón de la quinta plaza es de dos puntos y no hay anclajes ISOFIX. Como tiene una suspensión blanda, tiende a brincar, pero no hay balanceos excesivos en las curvas y frena con absoluta certeza.
Esto pensamos de la Mitsubishi Xpander
Al final, la experiencia a bordo de la Mitsubishi Xpander fue más satisfactoria de lo que esperábamos y tiene notables virtudes a nivel de confort y espacio. Pero también hay puntos mejorables que no podemos pasar por alto en un vehículo familiar cuya versión 2024 tiene un precio de $139.900.000, una cifra castigada por los aranceles de importación pues es fabricada en Indonesia.
Sobre todo cuando tenemos opciones como la Citroën Aircross Shine 7P, que ofrece características similares a un precio notablemente inferior. O también una Nissan X-Trail e-Power Sense, cuyo precio es más elevado pero lo recompensa con una mayor tecnología. De todas formas, algo que hace único a este modelo es el hecho de ser una minivan y no un SUV, lo cual tiene sus ventajas.
Al final, nos nos cabe la menor duda que la Mitsubishi Xpander se puede definir como «el vehículo de las tres F»: familiar, funcional y fácil de usar. Yendo más allá de lo que dice la ficha técnica puede resultar una gran alternativa para esos momentos puntuales donde se requiere la máxima versatilidad al momento de llevar mil cosas, muchas personas o todo al mismo tiempo.
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